jueves, 10 de febrero de 2011

Curso de Fernando Valero 5º Dan (Cocentaina, 5/2/2011) - ACTUALIZADO

El Maestro Nacional Fernando Valero

El gélido día 29 de enero del 2.011 empezó puntualmente el curso nacional de Aikido de Fernando Valero. El nivel de asistencia fue más que aceptable, viniendo gente de Castelló, Elig, Alcoy, Yecla y Cocentaina que colaboraron activamente en el buen desarrollo del mismo.

La jornada comenzó con un entrenamiento muy bien desarrollado con el boken, el objetivo del mismo era aprender a trabajar con las diferentes distancias, ma-ai, de-ai y zashin. El trabajo se realizó tanto individualmente, como por parejas y tríos. La clase incidió en técnicas encadenadas de boken intentando llegar a una perfecta relación espacial entre Aite y uno mismo.


Una vez entrados en calor, se procedió realizar a un trabajo en suwari-waza, en este caso la idea era principalmente, el centro. Se trataba de que todo el movimiento partiera del mismo, moviéndonos con las caderas y sacando la potencia de nuestro bajo vientre, sobre este concepto hizo mucho hincapié, corrigiéndonos durante la ejecución de las diferentes técnicas. En suwari-waza, ejecutamos: shomen-uchi irimi-nage, shomen-uchi ikkyo y kata-dori menuchi nikyo.
  
Acto seguido procedimos a hacer un descanso de cinco minutos para reponer líquidos y ajustarse la hakama, tras los cuales procedimos a trabajar con el jo, la idea era seguir con el eje central del curso que eran las diferentes distancias posibles entre uke y tori y el cómo solventar los diferentes problemas que las mismas podían plantearnos. Efectuamos primero series combinadas e individuales en shomenuchi, yokomen-uchi y tsuki con los diferentes desplazamientos en irimi, tenkan, irimi omote, etc. Tras los cuales el trabajo paso a realizarse por parejas, siendo generalizada la sensación de que en esta distancia tan larga era más difícil encontrar una buena relación espacial uke y tori.

Acabada la clase de la mañana y tras una muy merecida ducha, nos fuimos a comer a un conocido bar de Cocentaina, como no, una paella. Después de reposar un poco la comida con una agradable tertulia, efectuamos una rápida visita turística a la capital del Comtat, visitando el Palau Comtal, la Església de Santa Maria, sus fuentes, etc.
   
De nuevo en el tatami, esta vez la idea que nos propuso fue la distancia media tachi-waza y lo primero que hay que lograr en esta distancia donde los ataques son muy rápidos y precisos es una buena postura (shisei), con la cual se consigue que nuestra fuerza interior sea visible en el exterior, cuerpo erguido pero relajado, nuestras piernas la base que nos sustenta, fuertes y firmes pero flexibles y rápidas y nuestra parte superior, cuello y omóplatos muy relajados. Sin este concepto, es imposible conseguir un buen ma-ai, de-ai y zashin.  

Ma-ai es la posición donde es fácil atacar y defenderse, si no conseguimos un buen ma-ai nuestro adversario sabrá si tenemos miedo, pues habremos dejado una distancia excesiva, o si por el contrario estamos muy confiados, ya que la distancia efectuada será muy pequeña, así pues, la idea es conseguir una perfecta relación, tiempo, espacio con un mínimo gasto de energía.

De-ai, es el instante preciso del encuentro, en ese momento, hemos de conseguir la dirección adecuada y que las posibles reacciones de uke sean las que nosotros hayamos provocado. En el instante preciso del encuentro hemos de lograr un control eficaz lo que no significa que este deba ser precipitado, sino más bien lo contrario. Hemos de saber ajustarnos a la velocidad de movimientos de uke, moviéndonos rápidos cuando él lo haga, y lento cuando él lo sea. 

Zashin es el futuro; una vez realizada la técnica ya no queda nada, todo empieza de nuevo. Es la posición primigenia y a su vez la última; sin zashin no existe Aikido. Con zashin cada acción, cada contacto se registra y almacena, todas las acciones ejecutadas y sentidas se imprimen para siempre en la memoria de nuestro cuerpo. Esta es la idea que se desarrolló durante todo el curso.

El trabajo realizado en tachi-waza fue el de ushiro waza eridori en sus diferentes variantes de ikkyo, kote-gaeshi, irimi-nage, koshi-nage y kokyu-nage. Así, pués, a lo largo del curso trabajamos primero desde una distancia larga (boken), segundo a una muy corta (suwari-waza), tercero pasamos a una muy larga (jo) y cuarto acabamos con una distancia media (tachi-waza).

Desde el club de Aikido Alcoy "OM" le agradecemos profundamente al Maestro Nacional Fernando Valero, por el desarrollo de este curso, el cual, desde nuestro punto de vista, fue más que satisfactorio y el que nos obligará a desarrollar en los próximos meses todo lo aprendido durante el mismo.   

Por Julio Maestre (1º Dan).
  


 Recorte de prensa en el periódico Información

1 comentario:

Anónimo dijo...

Buena crónica del curso. Me ha encantado la reflexión y el repaso de las técnicas y las bases que trabajamos en el curso.

¡A por el siguiente con Gilbert Milliat!